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Llevar una buena planificación de stocks es uno de los factores clave para que la empresa funcione correctamente. Debemos utilizarlo en la fabricación o venta de productos para gestionar adecuadamente cada pedido. Si, por ejemplo, ofrecemos a los clientes un servicio rápido y cuando vamos a enviar un artículo, nos encontramos con el grave problema de no tenerlo disponible, puede ser un punto muy desfavorable para el negocio.
Para tener perfectamente organizadas las existencias de tu almacén, queremos detallarte algunos métodos de gestión eficientes. Poniéndolos en práctica conseguiremos los objetivos que nos marquemos.
1. Con el nivel de existencias mínimas, podemos calcular el volumen mínimo de stock que debemos tener en el almacén. De esta forma, cuando lleguemos al mínimo, tendremos que realizar un nuevo pedido.
2. Con el método de revisión de stock debemos realizar exámenes periódicos para controlar el inventario. Primero debemos fijar una cantidad adecuada para cada producto y, cuando calculemos que esa cantidad ha disminuido, tendremos que devolver las existencias a su nivel correspondiente.
3. Con el sistema de abastecimiento bajo demanda, conseguiremos reducir los costes, teniendo en inventario el mínimo de artículos. Tan solo haremos un pedido cuando necesitemos un producto en concreto. Este método es algo arriesgado porque podemos quedarnos sin existencias.
En conclusión, no importa el método que utilicemos siempre y cuando no afecte a la producción de la empresa.
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